Hoy nos paseamos por uno de esos lugares casi imposibles de ver, el Palacio de Liria, residencia en Madrid del Duque de Alba.
La fuente de Apolo, también denominada de las Cuatro Estaciones, junto con la fuente de Cibeles y la de Neptuno, forma parte de lo que se denominó el Salón del Prado, y se erigió como parte de la reforma que el rey Carlos III impulso en Madrid en el siglo XVIII.
Con sus 33 metros de diámetro nos situamos bajo la cúpula más grande de España y la cuarta de Europa.